* Artículo publicado en la Revista Herramienta Nº 47, julio de 2011, Buenos Aires.
** Damiano Tagliavini, Lic. en Ciencia Política (UBA), becario del Instituto Nacional del Agua. Ignacio Sabbatella, Lic. en Ciencia Política (UBA), becario de Conicet, Instituto Gino Germani.
1) Introducción
La crítica situación ecológica global, evidenciada en los procesos de cambio climático, agotamiento de bienes naturales y degradación ambiental, acompañados de crecientes conflictos socio-ambientales, nos sugiere preguntarnos qué relación guarda con los fundamentos del modo de producción y reproducción capitalista.
A través del presente artículo procuramos exponer la relevancia de la teoría marxista para analizar esa crisis ecológica y contribuir a la cimentación de un Marxismo Ecológico (en adelante ME), como una novedosa corriente de pensamiento crítico. A pesar de las experiencias fallidas del denominado “socialismo real” en su relación con la naturaleza y de la propensión del capita¬lismo a internalizar el discurso ambientalista, creemos posible observar una significativa tenden-cia de algunos pensadores marxistas a incorporar la ecología y de buena parte de los movimientos ambientalistas a radicalizar su praxis política hacia posiciones anticapitalistas.
De esta manera, nos proponemos rastrear aportes en la obra de Marx y Engels, analizar las críticas al marxismo que se realizan desde la Economía Ecológica y, finalmente, enumerar algunos pre- cursores del ME, junto a algunos conceptos que ayudan a entender la relación entre capital y naturaleza.
No pretendemos agotar el tema aquí sino apenas realizar una contribución crítica, planteando la pertinencia del debate y sus potencialidades para la investi¬gación científica y la actividad política.
2) Aportes ecológicos en la obra de Marx y Engels
A pesar de los prejuicios vigentes en el ambientalismo, Marx y Engels analizaron en diversos pasajes los vínculos entre el mundo social y el mundo natural. La distinción analítica que proponemos no debe entenderse como conceptos cerrados e independientes, sino más bien como temas vinculados entre sí.
a) Concepción materialista de la naturaleza
Resulta sugerente comenzar con el trabajo de John Bellamy Foster (2004) quien reconstruye una concepción materialista - dialéctica de la naturaleza en la obra de Marx. Arroja luz sobre tres grandes herencias que han sido descuidadas: el filósofo griego antiguo Epicuro, el químico agrícola Justus Von Liebig y Darwin. El primero inspiró una visión materialista de la naturaleza. A partir del segundo construyó una comprensión del desarrollo sostenible. De Darwin adoptó un enfoque co-evolucionista de las relaciones entre los humanos y la naturaleza. Sin detenernos aquí, señalamos que dicha reconstrucción echa por tierra el prejuicio de la producción intelectual de Marx como ajena al mundo natural.
En sus Manuscritos de 1844, Marx esboza una definición del concepto de naturaleza: "La naturaleza es el cuerpo inorgánico del hombre, es decir, la naturaleza en cuanto no es ella misma el cuerpo humano. El hombre vive de la naturaleza; esto quiere decir que la naturaleza es su cuerpo, con el que debe permanecer en un proceso continuo, a fin de no perecer. El hecho de que la vida física y espiritual del hombre depende de la naturaleza no significa otra cosa sino que la naturaleza se relaciona consigo misma, ya que el hombre es una parte de la naturaleza” (Marx, 2004: 112).
En este pasaje se hace evidente que para Marx no existe dico-tomía entre el ser humano y la naturaleza. Esta no es algo externo o un mundo exterior. “El hombre no está en la naturaleza, sino que es naturaleza” (Vedda, 2004: XXIX). La naturaleza le ofrece al hombre su medio de vida inmediato, así como la materia, el objeto y la herramienta de su actividad vital, es decir el trabajo. Esto nos conduce a plantear una continuidad con su obra de madurez, especialmente en El Capital.
Gracias por aportación, es verdad los estudios d Marx comienzan a tomar la en cuenta la naturaleza como un elemento político-económico de gran importancia, que naturalmente encajaba con sus teorías e ideales políticos, por lo cual es lógico que en algún momento cualquier seguidor de este pensamiento lo considere, lo único que consideraría importante tratar de analizar es que tan factible seria un capitalismo ecológico, se que suena bastante utópico pero con bases solidas que satisfagan los principios básicos de ambas seria posible, supongo que aun es necesario que se hagan mas estudios.
ResponderEliminarJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA. ¿Hay algo en lo que no intenten forzar a Marx, rojos?
ResponderEliminarPffff... ya ni saben en qué aplicar las categorías de análisis marxista, hablar de un "marxismo ecológico" no solo es anacrónico, es verdaderamente lamentable. Se pueden utilizar ciertos elementos del análisis de Marx ( no marxista), pero ¿ marxismo ecológico? no mamen jajajaja.
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